8 DE AGOSTO DE 1880 - MADRID: "ESPADA NOVILLERO" RAIMUNDO RODRÍGUEZ ("VALLADOLID") MATA DOIS TOUROS FARPEADOS PELO CAVALEIRO JOSÉ BENTO DE ARAÚJO (na imprensa espanhola)



RETRATOS VIEJOS

Raimundo Rodríguez (Valladolid)


Entre las figuras secundarias muy simpáticas que hubo en el toreo durante el último cuarto del pasado siglo (nota: XIX), encontrábase un torero castellano llamado Raimundo Rodríguez Ayllón, apodado Valladolid, por haber nacido en una villa de dicha provincia, en la histórica Tordesillas, lugar de reclusión de doña Juana la Loca, el día 23 de enero de 1854. Fué empleado del ferrocarril en la estación de Valladolid, y después de servir en el ejército se dedicó de lleno a la lidia de reses bravas, matando toretes en la placita de los Campos Elíseos, de Madrid, durante los años 1876 y 77.

Como todos los novilleros de las promociones anteriores a Mazzantini y el Espartero, alternaba sus labores de banderillero con las de estoqueador, y como tal matador en novilladas logró bastante reputación y no pocos ajustes. Era grueso y de baja estatura, y como cualidades dignas de loa se destacaban en él, principalmente, la modestia y el compañerismo, aquélla, para no ir más allá de donde le dictaba su buen sentido, absteniéndose de tomar la alternativa, y la otra, para ponerse siempre a disposición de cualquiera, cuando de realizar actos meritorios se trataba.

Quedamos, pues, en que si como Valladolid era un torero muy estimable, como Raimundo fué un hombre bueno a carta cabal y con sentido común, además, cosa que es patrimonio de muy pocos toreros.

El día 8 de agosto de 1880 debutó nuestro hombre como espada novillero en Madrid, debut que se efectuó en una función mixta y sui géneris, pues tuvo un carácter que so entonces era frecuente, en nuestros días es desconocido, por revestir más seriedad las novilladas de hogaño que las de antãno.

En la que nos ocupa, se corrieron primeramente dos embolados, para aficionados principiantes; luego, Juan Ruis (Lagartija), estoqueó dos toros de puntas de la ganadería de Yague, jugados en lidia ordinaria y, finalmente, el debutante dió muerte a otros dos bichos del mismo ganadero, después de haber sido rejoneados por el portugués (José) Bento de Araujo.

Hizo campañas muy aceptables en América y en el mediodía de Francia; figuró como banderillero en las corridas reales del año 1979; perteneció en 1887 a la cuadrilla de Punteret (Joaquín Sanz), tomó parte en las corridas celebradas en París en 1889 y toreó por última vez en Madrid el 27 de octubre de 1892, estoqueando unos toros de Aleas rejoneados por cavalheiros (nota:cavaleiros) portugueses, como prólogo de la lidia de seis de don Félix Gómez, que estoquearon Lajartijo, Mazzantini y Tortero, siendo ésta una de las corridas que se dieron con motivo de IV Centenario del descubrimiento de América.

Poco fué lo que después vivió, pues el 24 de abril de 1893 falleció en Madrid, de un ataque de disnea.

La muerte siempre es temprana y no perdona a ninguno.

Así dijo Calderón, y dijo bien, pues morir a los treinta y nueve años, no diré yo que sea morir de madrugada, pero bastante temprano, qué duda cabe?

Don Ventura


In LA FIESTA BRAVA, SEMANARIO TAURINO, Barcelona - 14 de Outubro de 1926