LISBOA - TEMPORADA DE 1903


La temporada de 1903 en Lisboa.

Siguiendo la costumbre de años anteriores, vamos á dar á los lectores de SOL Y SOMBRA un resumen del movimiento taurino en Lisboa durante la temporada de 1903, que finalizó con la corrida extraordinaria en obsequio al joven Monarca español Alfonso XIII con motivo de su visita á Portugal.

La inauguración oficial de la taurómaca función tuvo lugar el 12 de Abril; pero antes echó la empresa dos corridas, una en que trabajó el espada Bombita chico, celebrada en 15 de Marzo, y otra dedicada al Rey de Inglaterra cuando vino á Lisboa D. Eduardo VII.


En la organización de las corridas mantuvo la empresa Batalha el buen criterio que viene demostrando desde que tiene á sua cargo la explotación de nuestro primer circo taurino. Buscando toros de las mejores vacadas y contratando diestros de rewconocido mérito, ha dado pruebas de desear servir bien á los aficionados, preparando los espectáculos con los mejores elementos artísticos. Sin embargo, no siempe la afición quedó satisfecha con el éxito de las funciones, y eso fué debido casi siempre á los señores ganaderos, que lejos de enviar al redondel toros en condiciones para la lidia, muchas veces presentaron bueyes de carreta ó chivos sin presencia. Con ganado endeble ó manso, es difícil que una corrida resulte buena, y de ahí que no todas las funciones obtuviesen el beneplácito de la gente aficionada. Dada la escasez de toros, la empresa, á fin de estimular á los criadores de reses bravas, promovió un certamen de genaderías, ofreciendo dos premios pecuniarios: uno para el ganadero que presentara la res de mejor trapío y otro destinado al toro que fuese más bravo. Dicho concurso tuvo lugar en 7 de Junio, jugándose reses de los Sres. Emilio Infante, Faustino da Gama y Marqués de Castello Melhor. El jurado, compuesto de socios del Real Club Tauromachico Portugués, otorgó el premio de bravura á un cornúpeto de Emilio Infante y el destinado al toro de mejor trapío, á una res de Faustino da Gama.

Además de esta corrida, que llamó naturalmente la atención de los aficionados, hubo también las dos fiestas reales, dedicadas á los Reyes de España é Inglaterra, en que el público disputó las entradas con gran entusiasmo, vendiéndose los billetes á elevados precios. En cambio de otras corridas organizadas con elementos de más fuste y en que las entradas fueron más baratas, no tuvieron la concurrencia que era de presumir!!...

Pero no nos proponemos hacer aquí el juicio crítico de la temporada, toda vez que ese estudio ya figura en las páginas de SOL Y SOMBRA, según las reseñashechas por el respectivo revistero y distinguido aficionado D. Carlos Abreu. Por eso y como va algo largo este introito, pasamos á dar una estadística relativa al año taurino de 1903.

Las corridas efectuadas fueron 26, de las cuales 12 organizadas por la empresa y las restantes por otras personas. En dichas funciones se lidiaron toros de las siguientes ganaderías:

Emilio Infante ... 43 toros.
Estevam de Oliveira ... 40 toros.
Companhia das Lezirias ... 30 toros.
Faustino da Gama ... 23 toros.
Marqués de Castello Melhor ... 22 toros.
Dr. Guirado ... 20 toros.
M. S. Correia Branco ... 12 toros.
Casa de Bragança ... 10 toros.
J.R. Vaz Monteiro ... 10 toros.
Eduardo Marques ... 10 toros.
Luiz da Gama ...  10 toros.
Simao da Veiga ... 10 toros.
Roberto y Roberto ...  8 toros.
Thomas Piteira (con el hierro de)...  1 toro.
Companhia das lezirias (con el hierro de) ...  1 toro.
Miura ...  1 toro.
Arribas ...  1 toro.
Pablo Romero ...  1 toro.
Campos Varella ...  1 toro.
Félix Urcola (Adalid) ...  1 toro.
Fernando Parladé (Clemente) ...  1 toro.

Total ... 256 toros.

Biblioteca nacional de España

El personal que tomó parte en las corridas, fué el siguiente:

Rejoneadores.

José Bento de Araujo ...   8 corridas.
Fernando de Oliveira ...  15 corridas.
Manuel Casimiro ...  12 corridas.
Joaquín Alves ...   8 corridas.
Simoes Serra ...   9 corridas.
Eduardo Macedo ...   8 corridas.
F. Ricardo Pereira ...   1 corrida.
José Casimiro ...   3 corridas.

Matadores de toros.

Francisco Bonal, Bonarillo ...   1 corrida.
Antonio Reverte ...   1 corrida.
Antonio Fuentes ...   2 corridas.
Francisco González, Faico ...   4 corridas.
Emilio Torres, Bombita ...   2 corridas.
José García, Algabeño ...   3 corridas.
Joaquín Hernández, Parrao ...   2 corridas.
Antonio Montes ...   3 corridas.
Ricardo Torres, Bombita chico ...   1 corrida.
Manuel Lara, Jerezano ...   1 corrida.
Rafael Molina, Lagartijo chico ...   1 corrida.
Rafael González, Machaquito ...   2 corridas.
Manuel Jiménez, Chicuelo ...   3 corridas.
Vicente Pastor, Chico de la blusa ...  1 corrida.
Rafael Gómez, Gallito ...   2 corridas.
Diego Rodas, Morenito de Algeciras ... 1 corrida.

Matadores de novillos.

Tomás Alarcón, Mazzantinito ...   1 corrida.
Manuel Torres, Bombita III ...   2 corridas.
Manuel Molina, Algabeñito ...   1 corrida.
Francisco Crespo, Currito ...   1 corrida.

Picadores.

Manuel Crespo ...   1 corrida.
José Gacha ...   1 corrida.

Banderilleros portugueses.

Joao Calabaça ...   5 corridas.
Theodoro Gonçalvez ...  13 corridas.
Jorge Cadete ...  21 corridas.
S. Calabaça ...  13 corridas.
José Martins ...   3 corridas.
Francisco Saldanha ...   8 corridas.
Torres Branco ...  14 corridas.
Manuel dos Santos ...  17 corridas.
Guilherme Thadeu ...   6 corridas.
Thomaz da Rocha ...  19 corridas.
Carlos Gonçalvez ...   2 corridas.
Luiz Homem ...   1 corrida.
Luciano Moreira ...   2 corridas.
Ferreira Estudante ...   2 corridas.

Banderilleros españoles.

Francisco Suárez, Páqueta ...   4 corridas.
manuel Blanco, Blanquito ...   3 corridas.
José Hernández, Americano ...   3 corridas.
José Moyano ...   3 corridas.
M. Calderón ...   3 corridas.
E. Merino, Sordo ...   3 corridas.
Francisco Sánchez, Currinche ...   2 corridas.
Creus, Cuco ...   2 corridas.
Antonio Bravo, Barquero ...   2 corridas.
E. Borrego, Zocato ...   2 corridas.
Perdigón ...   2 corridas.
Sevillano ...   2 corridas.
M. García, Garroche ...   2 corridas.
Luis Roura, Malagueño ...   2 corridas.
Braulio Martínez ...   2 corridas.
José Simó, Chatín ...   2 corridas.

Tomaron parte en una corrida, los siguientes: Francisco González, Pataterillo; Niño de la Huerta; Manuel Ruiz, Nene; E. Pérez, Torerito; M. Rodas; F. González, Chiquilín; Manuel Colino, Nieto; M. González, Recalcao; Juan Rodríguez, Mojino; Perico; E. Cerco, Punteret; E. García, Limeño; Chicorrito; Posturas; R. Arangó, Aranguito; Roberto Alcañiz; Justo Sánchez, Zurini; y Rafael Toledo, Paleño.

Alternativas.


Durante el año de 1903 tomaron la alternativa en el redondel de Campo Pequeño y en las fechas indicadas, los siguientes artistas:
Banderillero Ferreira Estudante en 9 de Agosto, otorgada por su compañero Jorge Cadete. En 26 del mismo mes también recibió la alternativa de manos de Joao Calabaça, el banderillero Luciano Moreira, y finalmente, en 6 de Septiembre Manuel Casimiro dió la alternativa á su hijo el joven rejoneador José Casimiro.

Funciones suspendidas y trasladadas.


Por causa de la lluvia fueron trasladadas cuatro corridas, como sigue: La anunciada para 16 de Julio, en que debía torear el espada Fuentes y que se celebró el día inmediato con el concurso del mismo diestro. La de 20 de Septiembre, que tuvo lugar el día 27 de dicho mes; el beneficio del banderillero Thomas da Rocha, que estaba anunciado para el 11 de Octubre y se efectuó el día 18. También la corrida en honra del Rey de España, que debía celebrarse en 11 de Diciembre, fué trasladada para el día 13 por causa del tiempo. Todas las corridas fueron de 10 toros, excepción hecha de la de 7 de Junio (concurso de ganaderías) y de la celebrada en 21 de dicho mes (despedida del espada Bombita), en las cuales se lidiaron ocho cornúpetos.

Terminando en 1903 el arrendamiento de la plaza de Campo Pequeño, la empresa propietaria del edificio acordó sacar á pública subasta por tiempo de tres años la explotación de dicho circo taurino. Al acto concurrieron dos solicitantes, y conocidas las proposiciones, quedó nuevamente la plaza en manos de los señores Batalha y Compañía. Los directores de la empresa propietaria, al comunicar en un oficio el hecho al adjudicatario, lo hicieron en términos muy lisonjeros, dando sus plácemes á los Sres. Batalha y Compañía por la manera inteligente y formal como habían organizado los espectáculos en los años anteriores.

Ignoramos lo que se propone la empresa exhibir en la temporada venidera, pues hasta la fecha nada ha resuelto sobre el asunto; pero, según informes que creemos verdaderos, está ya preparando nuevos alicientes á fin de mantener la buena reputación que ha conquistado entre el público y toreros, no sólo por la brillantez y competencia con que organizó las corridas, sino por el modo concienzudo y perito con que llenó su sometido durante el último trienio.

Al concluir estos renglones, hacemos votos para que la próxima temporada satisfaga por completo á la afición, y al mismo tiempo insistimos una vez más en pedir la publicación de un Reglamento, donde queden señalados los deberes y garantías del público, empresas, ganaderos y artistas, para que cada uno sepa las responsabilidades y derechos que les pertenece en todo lo relativo á la inimitable y muy popular diversión taurina.

Segismundo COSTA.

In SOL y SOMBRA, Madrid - 3 de Março de 1904

5 DE JULHO DE 1903 - LISBOA: DESPEDIDA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO (a pretexto da partida para o Pará, Brasil)



PRAÇA DO CAMPO PEQUENO

Empreza Batalha  12.ª Epoca - 1903

13-ª CORRIDA

DOMINGO 5 DE JULHO

A's 4 e meia horas da tarde

FESTA ARTISTICA E DESPEDIDA DO CAVALLEIRO
JOSÉ BENTO D'ARAUJO

EXTRAORDINARIA CORRIDA

em que serão lidados 10 Bravissimos Touros pertencentes
ao opulento lavrador Sr. ESTEVÃO D'OLIVEIRA

4 - CAVALLEIROS - 4

Fernando d'Oliveira, Joaquim Alves, Eduardo Macedo e José Bento d'Araujo

2 - ESPADAS - 2, os notaveis matadores de touros

José Garcia ALGABEÑO
e Diego Rodas MORENITO DE ALGECIRAS
que pela primeira vez toureia em Portugal

BANDARILHEIROS

T. Gonçalves, J. Cadete, F. Saldanha, Manuel dos Santos, Thomaz da Rocha e Moyano e Blanquito da cuadrilla de "Algabeño" e Roberto Alcaniz da cuadrilla de "Morenito"

Um Valente Grupo de Moços de Forcado do Riacho e Gollegã

BANDA MARCIAL ARTISTICA



DETALHE DA CORRIDA

 1.º para Fernando e Joaquim Alves
 2.º  "     Theodoro e Cadete
 3.º  "     F. Saldanha e M. dos Santos
 4.º  "     bandarilheiros hespanhoes
 5.º  "     Eduardo Macedo e José Bento

INTERVALLO

 6.º para Fernando e José Bento
 7.º  "     Thomaz da Rocha e Alcaniz
 8.º  "     bandarilheiros hespanhoes
 9.º  "     Joaquim Alves e E. Macedo
10.º  "   Theodoro, Cadete e M. Santos

Este programma pode ser alterado por qualquer motivo imprevisto.

Em vigor as disposições policiaes, da arena e do regulamento da Empreza Tauromachica

Preços e condiçoes - Vide cartazes affixados

José Bento d'Araujo, agradece profundamente reconhecido, a todas as pessoas que assistam á sua festa, e aproveita a occasião de se despedir do publico e offerecer os seus prestimos limitados no Pará, para onde parte no dia 18 de julho.

Companhia Typographica

20 DE MAIO DE 1894 - LISBOA: RETRATO DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO


JOSÉ BENTO D'ARAUJO


Publicando hoje o retrato de José Bento d'Araujo prestamos homenagem a um dos vultos mais proeminentes da tauromachia portugueza.

Cavalleiro arrojado, a sua carreira tem sido uma serie de triumphos. Nas praças de Portugal, nas de Hespanha, e ultimamente nas de França obteve sempre o mais enthusiastico acolhimento.

José Bento (de Araújo) conta apenas 38 annos, e em breve parte de novo para o estrangeiro.

Que os louros e a loiras continuem atapeando o seu caminho, é o que lhe desejamos.


In O GABINETE DOS REPORTERS, JORNAL INTRANSIGENTE, LITTERARIO E NOTICIOSO, Lisboa - 20 de Maio de 1894

12 DE MAIO DE 1904 - LISBOA: A MORTE DO CAVALEIRO FERNANDO DE OLIVEIRA


CORRIDAS & DRAMAS

Neste princípio de século outro facto ficaria a assinalar o toureio equestre da nossa terra: a morte de Fernando de Oliveira, ocorrida na praça do Campo Pequeno na tarde de 12 de Maio de 1904.

É natural, é certo mesmo, que tenham sido vários os desastres mortais verificados no toureio que vitimaram cavaleiros. Durante alguns séculos de prática, vários nomes devem ter ficado no caminho com as vidas decepadas pelas hastes dos toiros. A notícia desses desastres perdeu-se, contudo, na distância a que foram ficando, mas tudo leva a crer que raras figuras de relevo tenham tombado nas arenas, porque assim como se conhecem os desastres que vitimaram em Espanha o Marquês de Pozoblanco, retirado da praça já sem vida, e D. Diego de Toledo, filho do Conde de Alba, falecido em consequência de uma colhida, também se conheceriam os que a Portugal dissessem respeito. Desta forma e encarando com as devidas reservas a versão que chegou até à actualidade, parece pertencer ao Conde dos Arcos, filho do Marquês de Marialva, o primeiro desastre de vulto histórico ocorrido no toureio nacional.

Mais tarde, por volta de 1866, a praça da Nazaré era testemunha de outro desastre impressionante, pouco conhecido e lembrado pela modesta categoria do lidador que, só através do sacríficio da própria vida conseguiu passar à posteridade. Foi o cavaleiro Maradas que um toiro de Francisco Bate-folha trespassou, pondo termo a uma carreira humilde como as que mais o foram. Fernando de Oliveira, pelo contrário, era um nome de relevo na tauromaquia nacional e porque é, a bem dizer, uma figura contemporânea, esse facto dá uma presença ainda impressionante ao desastre ocorrido nessa tarde de Maio, na arena lisboeta. Por isso, o relevo que tomou a tragédia perante a história tauromáquica de Portugal e, sobretudo, nos anais da praça do Campo Pequeno.

Corriam-se toiros do Marquês de Castelo Melhor e de Vitorino Fróis, cinco de cada ganaderia. Com Fernando de Oliveira toureavam a cavalo José Bento de Araújo, Simões Serra e Joaquim Alves. Ambiente de alegria, enriquecido com a presença da Família Real.

O primeiro toiro, de Vitorino, foi lidado por José Bento de Araújo, saindo para o segundo Fernando de Oliveira, montando o seu cavalo Azeitona, que o toureiro havia comprado a Pinto Barreiros. Quando entrou na praça o toiro do Marquês de Castelo Melhor, número trinta, Ferrador de nome, causou espanto a sua corpulência. Mas não era verdadeiramente bravo. Dava até sintomas de já conhecer a lide, talvez em resultado da retenta a que fora submetido com o fim de o destinarem para semental. Fernando de Oliveira conseguiu prender-lhe o primeiro ferro à custa de lhe pisar os terrenos. Castigado, o toiro tornara-se mais perigoso ainda, e quando o cavaleiro tentou nova sorte, desta vez à meia volta, arrancou com furioso ímpeto, e, apanhando a montada pelas pernas, ergueu-lhe a garupa, foçando o cavaleiro a ser lançado ao solo. A queda fora desastrosa e o cavalo cairia também, embrulhando-se toureiro e montada ante a decidida investida do toiro. Surgem os toureiros ao quite, o cavalo corre desordenadamente pela arena, mas Fernando conserva-se no solo, inanimado. Surge a impressão da tragédia irremediável, o que poucos momentos depois se confirmaria.

Não é fácil, nas circunstâncias em que o desastre se deu, pormenorizar a acção até se apurar o golpe que terá vitimado o toureiro. Como geralmente acontece em casos desta natureza, as opiniões foram diversas. Diziam uns que o toiro não chegou a alcançar o toureiro que, caindo desamparadamente no solo, teria sofrido a fractura da base do crânio; afirmavam outros que essa fractura fora provocada pela pancada de um estribo; garantiam outros ainda que o cavalo, ao levantar-se, teria atingido o cavaleiro com um coice, e, por último, houve quem asseverasse que após a colhida, pretendendo levantar-se, Fernando de Oliveira esteve um momento de joelhos, o suficiente, porém, para que o toiro investisse, tornando irrmediável o desastre. Escassos dias depois, mas quando a surpresa dos primeiros instantes já havia passado, permitindo a análise serena dos acontecimentos, uma publicação lisboeta referia por esta forma a trágica ocorrência:

'Estrugia a praça de aplausos, levantava-se o público ante o donaire do cavaleiro que, na sua montada côr de azeitona, direito, elegante na casaca encarnada bordada a prata, recebeu a farpa que lhe entregava o bandarilheiro espanhol Currinche. Fernando de Oliveira veio fazer os cumprimentos a S.S.M.M. e correu a aguardar o toiro à gaiola.

O bicho era castanho, de um tom torrado, com bragas no ventre e grande.

O cavaleiro perdeu a sorte de gaiola, mas veio com valentia à meia volta, saiu em falho e fez outra sorte, cravando um magnífico ferro à tira, o que causou delirante entusiasmo.

De novo a praça estrugiu em aplausos; ele, na sua veste vermelha, aquecido pela ovação, quiz apertar o bicho que se encolhia em frente do sector seis, sombra-sol, para onde o cavaleiro se dirigiu, a citá-lo de novo em voz rija. Rematou então a sorte em meia volta e cravou o ferro. Mas neste momento o toiro investiu de novo, para os vultos, Fernando de Oliveira ficou a descoberto e o animal continuou a marrar furiosamente contra ele, enquanto dois espanhois, com as capas, buscavam distrair a fera.

O artista foi, finalmente, levantado: tinha o crânio fracturado, dizendo-se ter sido o cavalo ao erguer-se que o calcara com uma das ferraduras.'

Fosse como fosse, nessa tarde de 12 de Maio de 1904, a tauromaquia portuguesa vestia crepes pela morte desse valente toureiro, que soube cativar a simpatia de todas as classes sociais e a admiração dos exigentes, pelo seu correcto toureio e pelas invulgares qualidades de equitador.

A felizmente rara frequência destes desastres envolve a figura de Fernando de Oliveira numa auréola de prestígio, com a qual perdurará na memória daqueles mesmo que não o conheceram. Fica como um símbolo.


É fácil de compreender quanta influência terá exercido nos sectores tauromáquicos a mudança de regime verificada em Portugal em 1910. As circunstâncias em que surgia a República, saída de um movimento revolucionário, estabelecia um ambiente em que toda a hostilidade parecia de menos contra os antigos hábitos e as velhas tradições. Verificava-se como que a necessidade de estabelecer uma sociedade nova, assente em novos hábitos, e o toureio, como expressão fidalga e tradicional, seria atingido da forma mais incisiva. Os toureiros da nobreza, que mantinham a pureza dos sistemas e das intenções, viram-se coagidos a afastarem-se das arenas, onde, sem contrôle, os profissionais deram largas a uma liberdade e transigência que afastaria o toureio a cavalo da sua verdadeira expressão artística e técnica. Por sua vez, as empresas, sem ter a quem verdadeiramente respeitar e sedentas de lucros, tornariam mais frequente ainda a utilização dos toiros corridos - o que já se vinha observando anteriormente - e o toureio equestre teve de rever sistemas aplicáveis a tal espécie de toiros, que exigiam uma técnica muito especial. E a lide a cavalo decaiu mais ainda, não tanto no entusiasmo que despertava, como na sua secular expressão. Justamente pela transcendente compreensão a que obriga, o público aceitava-o assim mesmo e até constituía motivo de aplauso o saber-se que um lidador enfrentaria um toiro cujo passado já se conhecia, através das provas que dera.

Estas afirmações não pretendem regatear méritos aos cavaleiros que então ficaram em actividade, porque é absolutamente crível que nomes como o dos Casimiros, José Bento de Araújo, Eduardo de Macedo e outros, tivessem sido tão grandes como os maiores se o ambiente em que exerceram o toureio os obrigasse ao respeito por regras tradicionais que se achavam quase olvidadas, apesar da lição trazida pelo portentoso Vitorino de Avelar Fróis e da mal esboçada continuação observada em Joaquim Alves, ao que parece discípulo do grande mestre. Mas é evidente que se originariamente o toureio equestre assentou em princípios que levaram a não considerar o toiro como uma fera, mas apenas como um vulgar adversário, ante o qual se deviam pôr em jogo valentia e lealdade (atributos que o próprio toiro ostenta quando puro), seria falseado na sua essência desde que houvesse de enveredar por aqueles caminhos a que obrigava a lide de reses corridas.

Por outro lado, o estado de atraso em que se mantinha, de uma maneira geral, a criação do gado bravo destinado às lides, também não proporcionava grandes elementos para que se tivesse presente aquele princípio de lealdade, segundo o qual 'mais valia perigar esperando do que ferir fugindo'. E, assim, o que mais de frente se fazia por então era a tira, a maior parte das vezes marcando-se tão pronunciadamente a curva de entrada que a sorte perdia grande parte da sua natural beleza. Tanto assim era que, num juízo crítico do cronista António Rodovalho Duro (Zé Jaleco), referente a 1911, pode ler-se este apontamento curioso: 'O Toureio a cavalo é, geralmente, executado apenas para armar ao efeito; pica-se de todas as maneiras, sem defender os ginetes, que se sujeitam a tremendas colhidas, não obstante fazerem-se os remates das sortes livres de cacho, isto é, quando o cavalo tem passado a cabeça do toiro'.

Contrariamente ao que hoje acontece, apesar do entusiasmo público rodear e favorecer o toureio montado, este atravessou, por essa altura, um período de decadência naqueles aspectos que o ligavam à tradição e intenção, que desde os mais remotos tempos orientavam a maneira de agir contra um toiro desde uma sela e que determinavam o combate frete a frente, sem disfarces ou qualquer possibilidade de lançar mão a recursos menos airosos, que aliás as próprias regras condenavam com tal veemência que o tentá-lo atingiria irremediavelmente a honra do cavaleiro.

Mesmo em tais condições, alguns cavaleiros puderam marcar uma presença honrosa, entre os quais é justo destacar Manuel Casimiro de Almeida, que fora emulo de Fernando de Oliveira nessa luta de partidos que animou a tauromaquia nacional do princípio do século, José Bento de Araújo, que procurava em qualquer circunstância, o bom sentido do toureio, e, sobretudo, José Casimiro, que, embora distanciando-se um tanto dos moldes clássicos do toureio a cavalo, alcançou extraordinária fama, marcando uma época de brilhantismo e entusiasmo, assente na comunicativa alegria e juventude que haviam de caracterizá-lo até aos derradeiros dias da sua carreira, como se sobre si não passassem os anos.

In ILLUSTRAÇÃO PORTUGUEZA, Lisboa, Ano I, nº 29 - 16 de Maio de 1904

15 DE MAIO DE 1910 - CAUDETE: A PROPÓSITO DA PRAÇA E DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO


LA PLAZA DE CAUDETE

Biblioteca nacional de España

Caudete ha tenido una Plaza de 6.000 localidades que fué la primera de España entre las que existen en pueblos de su categoría. La mandó contruir, por capricho personal, el empresario de la Plaza de Alicante don Francisco Albalat Navajas, que dirigió las obras a un maestro, lo que fué causa de que encontrara serias dificuldades para conseguir autorización, una vez terminada, para ser abierta al público, ya que no había intervenido arquitecto alguno. Fué inaugurada el 15 de mayo de 1910, con siete toros, uno, de don Sabino Flores, para el rejoneador portugués (José) Bento de Araujo, y seis de Saltillo para Ricardo Torres, “Bombita”, que cortó tres orejas, y “Minuto”, que sustituyó a “Machaquito”. A la corrida acudieron menos de setecientas personas. La segunda corrida se celebró el 17 de julio del mismo año, interviniendo “Machaquito”, que fué cogido, y “Gordito”, en sustitución de “Bienvenida”. Los toros fueron de Slatillo y actuó por delante el rejoneador portugués Eduardo Macedo. Esta fué la segunda y última corrida que se celebró en el bello coso, que fué prácticamente cerrado. En 1939 salió en venta y se adquirió para su derribo, resultando dos obreros muertos en un desprendimiento. En 1950, dos niños de corta edad perecieron sepultados también por sus ruinas. Hoy ya no existe.



Esta es la breve, curiosa y trágica historia de la Plaza de toros de Caudete, que fué una de las más hermosas de España.

In EL RUEDO, Madrid – 17 de Setembro de 1959

PARIS - TEMPORADA DE 1891: JOSÉ BENTO DE ARAÚJO NAS CORRIDAS DAS ARÈNES DU BOIS DE BOULOGNE




París. - Durante la temporada del año último, en la plaza de la Rue Pergolèse, de París, se han verificado 26 corridas.


La 1ª, se celebró el 24 de Mayo, tomando parte en ella Angel Pastor, Joseito y Tinoco.

La 2ª, el 31 de Mayo, con Valentín, Joseito y (José) Bento d'Araujo.

La 3ª, el 4 de Junio, con los mismos diestros de la anterior.

La 4ª, el 14 de Junio, con Valentín, toreros landeses y (José) Bento d'Araujo.

La 5ª, el 21 de Junio, con los diestros de la anterior.

La 6ª, el 28 de Junio, con Mateїto, los landeses, (José) Bento d'Araujo y la rejoneadora Mlle. Genty.

La 7ª, el 5 de Julio, con Valentín, Mateїto, los landeses, (José) Bento d'Araujo y Mlle. Genty.

La 8ª, el 12 de Julio, con los mismos de la anterior corrida.

La 9ª, el 19 de Julio, con los mismos diestros.

La 10ª, el 26 de Julio, con los mismos diestros.

La 11ª, el 2 de Agosto, con los mismos diestros.

La 12ª, el 15 de Agosto, con Valentín, Hierro, los landeses y (José) Bento d'Araujo.

La 13ª, el 16 de Agosto, con Bernardo Hierro, Ojeda, los landeses y (José) Bento d'Araujo.

La 14ª, el 29 de Agosto, con los mismos diestros.

La 15ª, el 30 de Agosto, con los mismos de la anterior.

La 16ª, el 6 de Septiembre, con Angel Pastor, Mateїto y (José) Bento d'Araujo.

La 17ª, el 13 de Septiembre, con los mismos de la anterior.

La 18ª, el 20 de Septiembre, con Valentín, Mateїto y (José) Bento d'Araujo.

La 19ª, el 27 de Septiembre, con Angel, Mateїto y (José) Bento d'Araujo.

La 20ª, el 4 de Octubre, con Angel, Valentín y (José) Bento d'Araujo.

La 21ª, el 11 de Octubre, con los de la anterior corrida.

La 22ª, el 18 de Octubre, con Angel, Valentín, Joseito y (José) Bento d'Araujo.

La 23ª, 24ª, 25ª y 26ª, los días 25 de Octubre, 1, 2 y 8 de Noviembre, con Valentín, Joseito y (José) Bento d'Araujo.

Los toros jugados en estas corridas fueron de las ganaderías de los Sres. Duque de Veragua, Conde de Patilla, Udaeta, López Navarro, Puente y López (antes Aleas), Hijas de Aleas, Martínez (D.V.), Mazpule, Bañuelos, Salamanca, Eizaguirre Trespalacios, Santos, Viuda de Muruve, Orozco González Nandín, y Clemente.

In EL TOREO, Madrid - 1 de Fevereiro de 1892

LISBOA - A CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO



CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO

Rua da Sociedade Farmacêutica
LISBOA


As iniciais do cavaleiro: J(osé) e B(ento) na fachada do prédio.

NOTA: Foto cedida por Rogério de Oliveira Pampulha, descendente de José Bento de Araújo.

LISBOA - A CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO



CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO

Rua da Sociedade Farmacêutica
LISBOA



NOTA: Foto cedida por Rogério de Oliveira Pampulha, descendente de José Bento de Araújo.

LISBOA: A CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO



CASA DE JOSÉ BENTO DE ARAÚJO

Rua da Sociedade Farmacêutica
LISBOA




Painel de azulejos com José Bento de Araújo no centro da fachada do edifício.

NOTA: Foto cedida por Rogério de Oliveira Pampulha, descendente de José Bento de Araújo.

13 DE AGOSTO DE 1893 - LISBOA: OS JORNALISTAS TOUREIROS DE OUTROS TEMPOS...



Praça de touros

Em um dos dias d'esta semana, a empreza da praça de touros do Campo Pequeno offereceu aos representantes da imprensa a corrida de um garraio matinal e reservado.

Já sabiamos que todo o jornalista tem obrigação de, nas questões sociaes mais complexas e difficeis, prendre le taureau par les cornes - no sentido figurado da phrase. Mas d'ahi a arrostar um touro de carne e osso, ainda quando tanto a carne como o osso sejam tenros, vae uma grande distancia. Pois essa distancia venceram-n'a ha alguns dias redactores de diversos jornaes de Lisboa. Apenas appareceu na praça o novilho, os jornalistas pondo de parte a penna e empunhando as bandarilhas, saltaram a farpear o animal, com a destreza, a galhardia e o denodo de verdadeiros capinhas! Houve pégas de cara, pégas de cernelha e pégas de rabo!

O garraio corria e pulava, perseguido pelos ares de ferros que o ameaçavam de todos os lados! Foi um verdadeiro sucesso tauromachico! E ao cabo de alguns minutos, o pobre animal escorria mais sangue, do que o que corre dos adversarios politicos aggredidos pelos mesmos jornalistas. Provou-se ainda uma vez que mais magôa e mais fere um bom par de farpas, do que um bom par de tropos!

A imprensa toda rejubilou com o exito dos collegas, e lançou o nome dos vencedores á posteridade!


In A SEMANA DE LISBOA - SUPPLEMENTO DO JORNAL DO COMMERCIO, Lisboa

1896 - RIO DE JANEIRO: CAVALEIROS PORTUGUESES A CAMINHO DO BRASIL



Os famosos toureiros e, entre eles, página do periódico Sol e Sombra.
In Dom Quixote, Angelo Agostini, 1896. - Acervo ABL

No mesmo ano, em Lisboa, o jornal O Expresso, nº 63, domingo, 29/03/1896, noticiava:

Annuncia-se para domingo de Pascoa a inauguração da época.

Pelos pormenores que temos, a nova empreza esforça-se para apresentar uma corrida, que satisfaça os mais exigentes aficionados.

(...)

São cavaleiros os applaudidos Alfredo Tinoco e José Bento (de Araújo), que fazem as suas despedidas, pois partem brevemente para o Rio de Janeiro onde lhes offerecem um magnífico contracto.



NOTA: Documentos amavelmente cedidos por Luís Ramos, descendente de José Bento de Araújo.

12 DE AGOSTO DE 1893 - VENDAS NOVAS: JOSÉ BENTO DE ARAÚJO A PROPÓSITO DA NOVA PRAÇA DE TOUROS


        El Rey de Portugal es muy aficionado á los toros, tanto, que acaba de encargar á un arquitecto la construcción, en Vendas Novas, en un terreno perteneciente á la casa de Braganza, de una plaza de toros para su exclusivo uso particular.

        A semejanza de su abuelo, Juan V el Magnífico, el rey Carlos no desdeña el bajar á la arena del circo para desempeñar las faenas de los Tinocos y de los (José) Bento d'Araujo.


        Cuando esté construida la nueva plaza se verificarán en ella corridas de toros ante un público muy selecto. La cuadrilla regia se compondrá de aficionados de lo más granado de la aristocracia portuguesa. Los toros serán de ganaderías, y los caballos que monten los caballeros en plaza pertenecerán á las mejores cuadras.


        Inútil es decir que el servicio de la plaza lo harán empleados de la real casa, y que las moñas que luzcan los toros habrán sido hechas por damas palaciegas.

In EL ARTE TAURINO (Sevilha) - 12 de Agosto de 1893

28 DE JULHO DE 1927 - ARLES: JOSÉ BENTO DE ARAÚJO E A HISTÓRIA DA PRAÇA


LOS TAURÓDROMOS – PLAZA DE TOROS DE “ARLES”

Este circo romano cuya construcción se atribuye al Emperador Antonín del II siglo de nuestra era. Durante la dominación romana, varias peleas de reses y combates de gladiadores tuvieron lugar en él; algunos cristianos fueron también martirizados.

En el siglo VII los sarracenos hicieron de esta plaza un baluarte para la defensa de la ciudad, construyendo sobre sus cuatro puertas, sendas, torres o miradores.


Por el exterior tiene 136’13 metros de largo y 107’62 de ancho, circundándola 60 arcos de bóveda.
El piso bajo es de estilo lórico, com pilastras llevando cornisamiento com arquitrales, frisas y cornisas.
El piso de arriba es de estilo coríntio.

El atico no existe pero no importa pues los arcos de la bóveda que están festonéandose com el azul del cielo, dan al monumento un aspecto majestuoso y de gran armonía.

Antes tenía 43 filas de gradas que permitían alojar en ellas unos 25.000 espectadores, ahora la plaza no tiene cabida más que para 12.000.

Las dimensiones del redondel son de 60 X 40 metros.



La primera corrida de toros en esta plaza se dió en 1830 durante las fiestas celebradas con motivo de la toma de Argel (Argelia) por las tropas francesas. En dicha corrida tomaron parte solo elementos del país: toros y toreros.

Los diestros que han pisado el coso de Arlés en corridas de muerte (mise à mort) son:
El Gallo (padre), Mazzantini, Guerrita, Reverte, Fabrilo I, Fuentes, Quinito, Litri I, Lagartijillo I, Jarana, Bebe, Gorete, Minuto, Faico, Saleri I, Morenito de Algeciras, Vicente Pastor (cuando se apodaba Chico de la Blusa), Bombita II y Bombita III, Pouy II, Cocherito de Bilbao, Manolete, Curro Vázquez, Mazantinito, Gaona, Luis Freg, Chiquito de Begoña, Curro Posada, Lagartijillo Chico, Malla, Punteret, Chicuelo, Saleri II, Nacional I, Manolo Belmonte, Marcial Lalanda, Villalta, Pedro Pouly, José Puertas (Pepete) y los novilleros: Castillo, Bocanegra, Marinero, Gabardito y otros muchos de su categoría.

Hay que añadir los rejoneadores Españoles y Cavalheiros Portugueses.

(José) Bento de Araujo, Mariano de Ledesma, Capsir del Valle, Serrano, Ruy da Camara y el Francés Lescot.



(…)

JOSE NOGUERA

In LA FIESTA BRAVA (Barcelona) - 28 de Julho de 1927

2 DE SETEMBRO DE 1924 - LISBOA: JOSÉ BENTO DE ARAÚJO - A MORTE ANUNCIADA



José Bento de Araujo

FALECEU


A Empreza de Carruagens Aliança, Limitada, participa aos seus amigos e clientes o falecimento do seu socio gerente e amigo sr. José Bento de Araujo e que o seu funeral se realisa hoje, 3 do corrente, pelas 16 horas, da egreja do Coração de Jesus (a Santa Marta) para o cemiterio oriental.

In O SECULO - 3 de Setembro de 1924

15 DE MAIO DE 1910 - CAUDETE : JOSÉ BENTO DE ARAÚJO NA INAUGURAÇÃO DE "LA PLAZA MÁS BONITA DE ESPAÑA"


Plaza de Toros de Caudete (Albacete)

"La Plaza más bonita de España" era o título de um dos jornais espanhóis, dando notícia da construção em Caudete de uma praça de toiros, linda, magnífica e ao estilo bizantino.

FONTE: http://www.caudete.es/
    
    A praça foi inaugurada em 1910 e foi mandada construir por Francisco Albalat (NOTA: Navajas), conde de S. Carlos, que era um grande aficionado da festa taurina e possuidor de enorme fortuna.

    A praça de toiros construída em Caudete, uma pequena povoação com cerca de 7.000 habitantes nessa época, situada entre as províncias de Alicante, Valencia e Murcia, tinha lotação para 9.000 pessoas, Teve um percalço complicado antes da abertura, porque foi construída sem arquitecto e por um mestre-de-obras seguindo as indicações do conde, tendo o "Ayuntamiento" negado a respectiva autorização para a abertura ao público, o que só foi conseguido depois de ter sido paga uma elevada multa.

FONTE: http://www.caudete.es/

    Em 15 de Maio de 1910, teve lugar a inauguração, com cerca de 5.000 espectadores e o seguinte cartaz: 1 toiro de Damian Flores para o cavaleiro português José Bento d'Araújo e 6 toiros de Saltillo para os matadores Ricardo Torres "Bombita" e Rafael González "Machaquito". Acontece que uns dias antes da inauguração, Ricardo Torres foi colhido e foi substituído pelo matador Enrique Vargas "Minuto".

    Na imprensa no dia seguinte: O cavaleiro português obteve um "señalado triunfo"; Minuto "cumplió" e Machaquito "fué el héroe de la tarde, cortando 3 orejas". E comentou Francisco Moya em "Sol y Sombra": "No es posible describir la sensación que me causó la presencia de la plaza de toros de CAUDETE. Es tan hermosa que para si la quiseran muchas capitales de provincia."

    A praça de toiros foi quase completamente destruída com os bombardeamentos durante a Guerra Civil e mais tarde, em 1986, foi restaurada, tendo sido suprimido o terceiro piso e o gradeamento em ferro.

    Os restos da praça foram levados para Valencia. para construção do Mercado Colón.

NOTA:
Texto retirado do blogue Partebilhas 
(https://godinhoecunha.blogs.sapo.pt/). 
É reproduzido, aqui, com autorização do seu amável autor, Eng. Manuel Peralta Godinho e Cunha.