5 DE AGOSTO DE 1907 - MADRID: REJONEANDO... (na imprensa espanhola)


Biblioteca nacional de España

NUESTRO DIBUJO

Rejoneando.

La suerte de rejonear es una de las favoritas de los aficionados del vecino reino, y se ejecuta no pocas veces en nuestros circos taurinos, especialmente en las corridas llamadas reales y en extraordinarias de alguna resonancia.

Para practicarla necesita el caballero rejoneador como cualidades precisas: el valor, la serenidad, un perfecto conocimiento de la equitación, las precisas nociones del arte de torear y las condiciones de los toros con que ha de luchar.

Hay varios modos de practicar la suerte: frente, á tira, ó á estribeira, á la media vuelta, á garupa y alguna que otra de recurso.

Las más usuales son las de frente, á la media vuelta y á tira.

Para ejecutar la primera se coloca el caballero á una distancia oroporcionada frente al toro, al que llamará la atención, y una vez que parta hacia él espera la embestida ladeando el caballo lo suficiente en el momento de la humillación para que el cornúpeto no le alcance en el derrote, clavándole el rejón en el centro de la suerte.

Cuando los toros no acudan al llamamiento, el ginete llevará el caballo al paso y de cara al adversario hasta llegar á jurisdicción.

El caballo para estas suertes ha de obedecer bien y ser rápido en sus movimientos, y el caballero ha de tener mucha destreza.


Se puede rejonear de frente sin peligro con los toros boyantes y es dificil y expuesta con los revoltosos, con los que cortan el terreno, con los pegajosos y los que recargan.

La de rejonear á la media vuelta se ejecuta en la misma forma que la de banderillear en forma idéntica, marchando el caballero á buscar los cuartos traseros del toro, acelerando la marcha cuando lo juzga oportuno, y al llegar á corta distancia, llamará con la voz la atención de la res para que se revuelva rápidamente, en cuyo momento y al humillar el toro clavará el rejón, saliendo con velocidad por el correspondiente terreno.

La suerte de á tira se ejecuta generalmente con los toros quedaos, sin faculdades ó cuando están en querencias, y es muy semejante á la de banderillear al cuarteo.

In LA CORRIDA, REVISTA TAURINA ILUSTRADA, Madrid - 5 de Agosto de 1907