3 DE OUTUBRO DE 1892 - PORTUGAL: BICHOS Y HOMBRES...


NUESTRO DIBUJO


Portugal, lo mismo que el Mediodía de Francia, territorios ambos en que la afición á la lidia de reses bravas está bastante desarrollada, cuentan con algunas toradas suficientes á subvenir á las necesidades del espectáculo con las limitaciones que la no ejecución de la última suerte le impone; pero esa misma circunstancia de no sucumbir la noble fiera sobre la arena del Circo, influye sin género ninguno de duda para quitar valor é importancia á la ganadería á que pueda pertenecer.

Buena prueba de ello es que en la vecina República, fuera de los toros de la Carmargue y algunos contados de las Landas, los demás gozan de poco nombre y aceptación, y no son mucho más numerosas las marcas que en el reino lusitano disfrutan de más favor, hasta el punto de que, con sobrada frecuencia, se contrate para una y otra parte, juntamente con los toreros españoles, el ganado andaluz ó de Castilla.


En Villafranca de Xira, Portugal

En Portugal y en España ha adquirido, sin embargo, en estos últimos años, crédito y nombradía la vacada del opulento labrador D. José P. Palha Blanco, por haber tenido este señor el buen acuerdo de dedicar las reses de su propriedad á las Plazas de la Península, para lidiarse completamente á la española. Esto la ha hecho figurar, sin desmerecer, entre las más acreditadas del país, y le ha dado cabida en los carteles de nuestras Plazas, no obstante tener sus pastos en prados extranjeros.

No vamos á ocuparnos de las condiciones de esos bichos para la pelea, por haberlo hecho en cuantas ocasiones los hemos visto en nuestros Cosos; pero sí manifestaremos que los terrenos en que se crían y desarrollan, no tienen nada que envidiar á los más adecuados y excelentes para el objecto. En las inmediaciones de Villafranca de Xira, y no lejos de Lisboa, extiéndese las feraces dehesas del Sr. Palha, cuya frondosidad y verdura rompe en caprichosa y plateada línea el cauce por el que, tranquillas y murmuradoras, se deslizan las aguas del famoso Tajo; y en aquellas praderas fertilizadas por la cristalina corriente, bien apiñados en el grueso de la piara, bien diseminados en pequeños grupos, sestean los hermosos animales, que, con la variada pinta de sus pelos, destacando del verde tapiz que les sirve de alfombra, forman animado y pintoresco panorama.


Biblioteca nacional de España

Como cási todos los ganaderos, el hacendado portugués separa, en cerrados preparados al efecto, ó sea en parcelas de terreno, limitadas por árboles ó vegetación más poderosa que la de pastoreo, á los toros destinados á lidiarse en breve plazo, aislándolos, generalmente por corridas, del resto de la torada, y cuya operación, como de apartado, corre á cargo de los mayorales y cabestros.

Un detalle de estas maniobras está sorprendido en el dibujo de hoy. El bicho elegido, arropado por los mansos y vigilado por los vaqueros, atraviesa el río de una á la otra orilla, en dirección al cerrado que se le destina, y mentira parece que la tranquilidad y sumisión que entonces manifiesta, haya de trocarse pronto en la codiciosa bravura de que, al saltar al redondel, se encuentra poseído.


Biblioteca nacional de España

Realmente, es un bellísimo paisaje, lleno de placidez y armonía, el que ofrece la Naturaleza, en la pureza del cielo, la vegetación exuberante, los rayos solares quebrándose en el espejo de las aguas, os campinos montando gentilmente en las nerviosas cabalgaduras y los astados brutos, bañando sus extremidades en las ligeras ondulaciones de la corriente, y tan hermoso cuadro no podía pasar desapercibido al inteligente aficionado y reputado artista Sr. D. Carlos Relvas, que, juntamente con otros varios del mismo género, los ha reproducido por medio de la fotografía, de una de las cuales es copia el dibujo del presente número, que no será el único de esa clase que ofrezcamos á nuestros lectores.

Mariano del TODO Y HERRERO

In LA LIDIA - Revista Taurina, Madrid.

NOTA de Rui Araújo: La madre de D. José P. Palha Blanco era española.